Capitulo 327
Capitulo 0327 Senor Gonzalez, jqué haces? —Cunada, ahora que ya no vives en Villa Dragon, te has mudado a un hotel? Ese tipo de asuntos Pedro probablemente no los mencionaria por su propia iniciativa, asi que Bella supuso que Elena se los habia contado. —Entonces, shay problema? —]Jejeje, no malinterpretes, jno vengo a hacer de abogado defensor de mi hermano Pedro! Manuel dijo con gracia, —Solo queria preguntarte si te estas adaptando bien a la nueva vivienda. He oido que quieres comprar una casa, asi que si hay alguna de mis propiedades en la ciudad que te guste, jte la regalo! Bella lo rechazo sin pensarlo dos veces.
No es necesario, no recibo favores que no
I he pedido. Me compraré una yo misma Entendiendo que Bella no tenia ganas de charlar mas, Manuel se rasco la cabeza y continud: —Cunada, aunque Pedro y yo somos hermanos, en lo que respecta a los asuntos de su relacion contigo, mi posicion es la misma que la de la sefiorita Elena: jte apoyamos! Incluso para expresar su apoyo, tenia que dejar claro que coincidia con la postura de Elena.
Bella no pudo evitar preguntar. —¢Sera que tu también tienes algtn interés en Elena? Manuel se apresur6 a responder: — Cunada, no puedes decir eso a la ligera. La senorita Elena y yo solo somos amigos que congeniamos a primera vista, jjamas tendria pensamientos inapropiados hacia ella! Elena probablemente ni siquiera le gustaria ese tipo de hombre. This is the property of Nô-velDrama.Org.
Cunada, aunque te apoyo en tu decision, si crees que a él no le importas y solo quieres divorciarte por enojo, atin quiero interceder por él. En el fondo si le importas, solo que no sabe expresarlo I correctamente.
Dando rodeos, al final seguia hablando a favor de Pedro.
Manuel era sin duda un buen hermano para Pedro.
Bella respondio sin ganas: — Independientemente de si le importo o no, eso ya no tiene nada que ver conmigo.
Sefior Gonzalez, si no hay nada mas, me voy.
Manuel se topd con una negativa rotunda.
—Adids, cunada.
Anna entro a la oficina de Pedro.
En ese momento, Pedro estaba sentado frente al escritorio, con unos papeles
delante de él. Su rostro apuesto no mostraba cambio alguno y sus ojos negros no revelaban emocion alguna.
Anna dijo con cuidado: — Pedro, acabo de I hablar mucho con la gente de finanzas y I también hablé por teléfono con mi padre I durante un buen rato. Ahora tengo la boca seca, spuedo tomar un poco de agua antes de que hablemos de lo que sea? Pedro no se nego.
Entonces Anna tomo una botella de agua del refrigerador y se bebio la mitad de un solo trago.
Luego, se sento frente a Pedro y dijo: — Lo que quieres hablar conmigo parece ser algo serio. Tengo miedo de que después no tengas ganas de escucharme, asi que déjame decirte algo primero.
—;Qué cosa? —pregunto Pedro.
Sobre el incidente de la sobredosis en Villa Nube, no tiene nada que ver con
I Bella.
El rostro apuesto de Pedre cambi6 de I inmediato. —;Cémo estés segura de-eso? —Acaba de llamarme mi papa y me conto la verdad.
Anna explicé que, debido al incidente, su padre habia estado investigando exhaustivamente.
Entonces, en los tltimos dias, fue a Villa Nube y a la farmacia, incluido el hospital, y revis6 cuidadosamente todos los aspectos.
Finalmente, la farmacia admiti6 que un nuevo empleado habia confundido y mezclado varios medicamentos por accidente al empacarlos.
Dio la casualidad de que las pildoras que compro esa noche estaban empaquetadas por separado, y el empleado que le dio el medicamento por la noche no lo sabia, lo que provoco el accidente.
I Anna dijo muy sinceramente: — Pedro, mi papa se disculpa sinceramente por culpar a Bella. El solo estaba preocupado I por mi. T§ »Pero Bella debe estar muy molesta, asi I que te pido que le transmitas mis I disculpas.
Pedro no dijo nada.
Recordé lo que Manuel le habia dicho: [Si mi cufiada era inocente, jcuan dolorido y triste debia estar por todas las pruebas que habian reunido en su contra!) Por lo tanto, Bella realmente no toco las pildorasy él no la habia defendido a tiempo.
— Pedro, al final, la culpa es mia. Haré lo que sea para disculparme.
Anna lo miré y continud: »Bueno, ya he dicho todo. ;Ahora me diras por qué me llamaste a tu oficina?